El rector de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) consideró que la Batalla 19 de marzo de 1844 significó la consolidación de la entonces recién nacida independencia nacional.
Franklin García Fermín aseguró que ese acontecimiento militar, conocido también como Batalla de Azua, tuvo un efecto psicológico impactante en aquella sociedad que comenzaba a organizar el Estado Dominicano.
Dijo que los 22 días que mediaron entre la Declaración de Independencia y la Batalla, cuyo 154 Aniversario se conmemora hoy, fueron tres semanas difíciles durante las cuales los dominicanos se debatieron entre la certeza de un presente precario y la incertidumbre de un futuro borroso.
Sin embargo, afirmó que el triunfo en Azua le quitó el signo de interrogación a la situación que vivíamos en ese momento político y que les elevó la autoestima a los criollos para que la separación de Haití se convirtiera en un hecho indubitable y definitivo.
García Fermín consideró que de esa expresión épica del pueblo dominicano, se desprenden enseñanzas para el devenir, siendo una, según él, la que induce a comprender que cuando un pueblo unifica criterios y voluntades alrededor de una idea o proyecto de nación, se desencadenan fuerzas sociales, políticas y morales capaces de generar los cambios que los tiempos demandan.
La máxima autoridad de la UASD habló de este hecho histórico durante una ofrenda floral que hiciera la academia frente a su Puerta Oeste para conmemorarlo.
En este acto, también habló el profesor Ramón Rodríguez, de la Escuela de Historia, quien hizo una reseña histórica de la batalla y su importancia para fortalecer la Independencia Nacional, que se había declarado el 27 de febrero del mismo año.
Franklin García Fermín aseguró que ese acontecimiento militar, conocido también como Batalla de Azua, tuvo un efecto psicológico impactante en aquella sociedad que comenzaba a organizar el Estado Dominicano.
Dijo que los 22 días que mediaron entre la Declaración de Independencia y la Batalla, cuyo 154 Aniversario se conmemora hoy, fueron tres semanas difíciles durante las cuales los dominicanos se debatieron entre la certeza de un presente precario y la incertidumbre de un futuro borroso.
Sin embargo, afirmó que el triunfo en Azua le quitó el signo de interrogación a la situación que vivíamos en ese momento político y que les elevó la autoestima a los criollos para que la separación de Haití se convirtiera en un hecho indubitable y definitivo.
García Fermín consideró que de esa expresión épica del pueblo dominicano, se desprenden enseñanzas para el devenir, siendo una, según él, la que induce a comprender que cuando un pueblo unifica criterios y voluntades alrededor de una idea o proyecto de nación, se desencadenan fuerzas sociales, políticas y morales capaces de generar los cambios que los tiempos demandan.
La máxima autoridad de la UASD habló de este hecho histórico durante una ofrenda floral que hiciera la academia frente a su Puerta Oeste para conmemorarlo.
En este acto, también habló el profesor Ramón Rodríguez, de la Escuela de Historia, quien hizo una reseña histórica de la batalla y su importancia para fortalecer la Independencia Nacional, que se había declarado el 27 de febrero del mismo año.
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